En el 47 aniversario de la aprobación de la Constitución de 1978, el Partido Comunista de España (PCE) ha subrayado a través de un comunicado que la democracia en el Estado español no fue un regalo de los herederos de la dictadura, ni fruto de la iniciativa de la monarquía impuesta por Franco, sino la conquista directa de la clase trabajadora y del pueblo que se jugó la libertad, la vida y el exilio por derrotar al fascismo y reconquistar derechos.
El PCE rinde homenaje a todas las mujeres y hombres que lucharon en defensa de la legalidad republicana frente al golpe de Estado, la intervención del fascismo internacional y la posterior dictadura. “La democracia la trajo la lucha de la clase trabajadora”, recordaba hoy a través de su cuenta en “X” (anteriormente Twitter) el secretario general del PCE, Enrique Santiago, señalando que fueron las movilizaciones obreras, vecinales y estudiantiles las que doblegaron al régimen y abrieron el camino para un marco democrático.
Un pacto constitucional traicionado por la derecha y la oligarquía
El PCE recuerda que participó en la construcción del acuerdo constitucional del 78 con el objetivo de poner fin a la dictadura y avanzar hacia un Estado social y democrático de derecho. Sin embargo, denuncia que la burguesía y sus partidos incumplieron ese pacto desde el primer día, vulnerando sistemáticamente los derechos laborales, sociales, económicos y ambientales.
“El pacto constitucional lo rompió la derecha al impedir una vida digna para todas las personas”, ha señalado además Enrique Santiago, insistiendo en la urgencia de un nuevo marco que garantice empleo estable, salarios dignos, vivienda y servicios públicos de calidad.
Las políticas neoliberales de las últimas décadas, sumadas a la degradación institucional y a los escándalos que han cercado a la monarquía, han dejado claro para el PCE que el modelo del 78 está agotado. La inviolabilidad del rey, la corrupción de la Casa Real y la negativa de las élites a democratizar el Estado han reforzado la demanda de una alternativa republicana.
Hacia una Constitución que garantice derechos y autogobierno en un Estado federal y republicano
Frente al deterioro democrático, el PCE plantea la necesidad de un nuevo pacto constitucional que reconozca todos los derechos fundamentales de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y que articule un Estado federal, republicano, plurinacional y solidario. El objetivo: garantizar el autogobierno de los pueblos, la igualdad real entre mujeres y hombres, y un modelo económico sometido al interés general.
El texto reivindicado por el PCE debe ser la norma suprema de una democracia plena, transparente, laica y participativa, y debe establecer la propiedad común y la planificación económica democrática de los sectores estratégicos para poner la riqueza al servicio de la mayoría social trabajadora, no de minorías oligárquicas.
En esta línea, el coordinador federal de Izquierda Unida, Antonio Maíllo, ha recordado que “la mejor conmemoración llegará con un Estado federal y republicano que garantice todos los derechos”, denunciando que hoy, igual que ayer, quienes recortan libertades son los mismos que se envuelven en banderas para ocultar sus responsabilidades.
Un proceso constituyente hacia la Tercera República
El PCE llama a abrir un proceso constituyente popular, democrático y participativo destinado a abolir la monarquía y devolver la plena soberanía política, social y económica al pueblo. Un proceso que abra un horizonte digno para la juventud, proteja a las personas mayores y garantice derechos a toda la población.
Finalmente, el Partido Comunista de España apela a las fuerzas políticas, sindicales, sociales y culturales de progreso a organizar un frente amplio constituyente republicano que empuje colectivamente un nuevo proyecto de país donde los derechos no se declaren, sino que se garanticen de manera efectiva.
“De ello depende la vida y el futuro de la clase trabajadora y del conjunto del pueblo”, concluye el comunicado.
















