La Asamblea de la Juventud Trabajadora ha convocado una concentración el viernes 19 de diciembre a las 18:00 horas, en el Jardín Catedrático Fernando Piñuela, frente al hospital IMED Virgen de la Fuensanta, como respuesta a la agresión sexual sufrida por una paciente mientras se encontraba bajo anestesia en este centro sanitario.
Los hechos ocurrieron durante una operación de aumento de pecho el pasado 4 de diciembre, cuando dos enfermeras detectaron un comportamiento anómalo por parte del cirujano que realizaba la intervención. Ante la gravedad de lo observado, decidieron grabar la situación con sus teléfonos móviles y comunicarlo de inmediato a la dirección del hospital. El centro activó el protocolo correspondiente y puso los hechos en conocimiento de la Policía Nacional.
El cirujano, que había alquilado un quirófano para operar a una clienta privada y no formaba parte de la plantilla del hospital, fue detenido en Alicante y trasladado a los juzgados de Molina de Segura. La magistrada decretó su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza, atendiendo a la gravedad del delito investigado, a los indicios existentes y al riesgo de fuga. La paciente, que no era consciente de lo ocurrido debido a la anestesia, presentó denuncia tras ser informada por el hospital, lo que permitió que la causa continuara su curso judicial.
Este caso pone de manifiesto las carencias de control y supervisión en determinados ámbitos de la sanidad privada, donde prácticas habituales como el alquiler de quirófanos y la externalización de profesionales generan marcos de responsabilidad poco definidos. Estas condiciones aumentan la vulnerabilidad de las pacientes y dificultan la prevención de abusos, especialmente en situaciones en las que no pueden defenderse ni dar su versión de los hechos.
La concentración convocada busca visibilizar esta realidad, exigir responsabilidades y denunciar un modelo sanitario que prioriza la rentabilidad sobre el cuidado. Este caso se suma a una larga lista de abusos y violaciones en los centros médicos de la ciudad, tanto públicos como privados, a los que consideramos que debemos señalar y dar respuesta, por ello desde la AJT de Murcia se insiste en que la presencia y voz de las vecinas será muy importante para fortalecer la exigencias y hacerlas más visibles.
La respuesta colectiva es una herramienta necesaria para romper el silencio, apoyar a las víctimas y reclamar una sanidad basada en el control público, la transparencia y la protección efectiva de quienes la utilizan.















