CONSUMUR recomienda verificar antes de su compra si el modelo de baliza se encuentra entre los homologados por la DGT

El V16 conectado será el único dispositivo legal de preseñalización de peligro a partir del 1 de enero de 2026

0
6
Las mejores balizas V16 con geolocalización | Istock
Las mejores balizas V16 con geolocalización | Istock
Google search engine

La Asociación de Consumidores y Usuarios en Red, CONSUMUR, recuerda a los consumidores y usuarios la obligatoriedad, a partir del 1 de enero de 2026, de que los vehículos incorporen una baliza V16 como método de señalización ante una parada en la vía, sustituyendo a los actuales triángulos. No llevarla o que no esté homologada, supondrá sanciones económicas que oscilarán entre los 80 y los 200 euros, dependiendo de las consecuencias que conlleve la no señalización, así como pérdida de cobertura del seguro e incluso responsabilidad penal en caso de accidente con víctimas.

La baliza se ha de colocar en la parte más alta del vehículo, a fin de garantizar la máxima visibilidad. Tiene que disponer de geolocalización y conexión con la Dirección General de Tráfico (DGT). No obstante, a pesar de esa conexión, el conductor de un vehículo ante cualquier accidente o avería, deberá avisar a su compañía aseguradora y/o grúa, si fuera necesario.

Hasta el próximo 31 de diciembre se podrán seguir utilizando los triángulos, incluso las balizas, aunque no estén homologadas y, por tanto, no conectadas con la DGT. No obstante, a partir del 1 de enero, la baliza será el único instrumento válido en nuestro país y será obligatorio que el modelo se encuentre entre el listado de marcas y modelos validados por la Dirección General de Tráfico.

CONSUMUR recomienda no deshacerse de los triángulos dado que, si salimos de España, la baliza no tendrá validez. En este sentido, Roberto Barceló Vivancos, Presidente de CONSUMUR, manifiesta que “España es la única nación en el mundo con esta obligación, creando un modelo pionero que otros países observan con interés y expectativas. Pero lo que también es cierto que no están contrastados los motivos que han llevado a diseñar este mecanismo de alerta, y que estaba relacionado con el número de accidentes que la utilización de los triángulos, vienen provocando. Los accidentes de los vehículos parados en carretera, es un porcentaje muy pequeño el producido a los conductores de los mismos, no existiendo datos realmente de cuántos de este pequeño porcentaje se corresponde a raíz de que el conductor salga a poner manualmente la citada señalización. Señalando que también determinados expertos indican que la señal que emitirá la baliza no siempre podrá ser visible, dado que, en los días de mucho sol, apenas es perceptible, como también puede provocar accidentes en rasantes o curvas cerradas donde esté parado el vehículo. A esto hay que añadir que la señal a la central de Tráfico, no siempre tampoco será posible dependiendo de la cobertura existente.

Por tanto, el Presidente de CONSUMUR hace hincapié en que un mecanismo en fase experimental que en algunos aspectos tendrá que mejorar sustancialmente si verdaderamente quiere convertirse en una alternativa segura a las actuales señalizaciones que priman en el resto del mundo. Y a esto, debemos añadir un gasto más a los no pocos que conlleva el tener de alta un automóvil u otro vehículo cuyo uso sea obligatorio”, apostilla.

Consejos a la hora de adquirir una baliza V16

Ante la gran variedad de marcas y modelos presentes en el mercado, Las asociaciones de consumidores recomiendan consultar, antes de la compra, si se encuentra homologado.

Para ello hay que comprobar si tiene el código de homologación visible grabado en la carcasa o la tulipa y deberá empezar por “LCOE” o “IDIADA” y seguido de números, La forma más sencilla es verificar si se encuentra entre el listado publicado por la DGT.

También hay que asegurarse que el dispositivo tiene conectividad con la DGT 3.0, lo cual deberá indicarse en el embalaje.

En cuanto al precio cabe precisar que el mismo es libre y oscila entre los 25 y 80 euros, de media. No obstante, la organización recuerda que los modelos homologados no pueden incorporar funciones adicionales a la visibilización del vehículo accidentado y la remisión de su ubicación a la DGT.

Por otro lado, deben de ser capaces de emitir una luz de 360º de alta intensidad de forma intermitente y continua al menos durante 30 minutos. Una baliza no sólo tiene que ser visible, sino que debe mantenerse encendida todo el tiempo necesario hasta que llegue la ayuda. La autonomía real de la baliza encendida durante horas no es solo un dato técnico sino un factor que puede marcar la diferencia entre la seguridad y el peligro en carretera.

Igualmente, los modelos homologados deben de contar con una batería que garantice, al menos, 18 meses en espera. Es decir, cuando no se activa, al margen de si esta es o no recargable.

No hay que confundir este periodo de tiempo con la vida útil mínima de la baliza, más que nada porque aquí también entra en juego la vida útil de la conectividad (geolocalización), que en estos casos suele ser de 12 años.

Google search engine