La figura de Tony Blair, una década y media después de abandonar el número 10 de Downing Street, sigue siendo un enigma fascinante y controvertido en el escenario mundial. Lejos de retirarse a un segundo plano, el ex Primer Ministro británico ha cultivado una segunda carrera tan influyente como opaca, situándose en el epicentro de algunas de las crisis geopolíticas más complejas de nuestro tiempo. Su nombre resurge con fuerza en los corredores del poder, especialmente en Oriente Medio, donde su instituto, el Tony Blair Institute for Global Change (TBI), se ha convertido en un actor ineludible. Pero, ¿quién es realmente el Tony Blair de la era post-gobierno? ¿Un diplomático incansable que busca la paz y la prosperidad global, o un «lobista en la sombra» que ha perfeccionado el arte de monetizar la geopolítica? Este artículo de investigación se adentra en la red de influencias, los conflictos de intereses y las operaciones del TBI para desentrañar la verdadera naturaleza de su papel en el mundo actual.
La Red de Influencia Post-2007: El Nacimiento del Tony Blair Institute
Tras dejar el cargo de Primer Ministro en 2007, Tony Blair no se retiró de la vida pública, sino que redefinió su papel en la escena global. Inicialmente, sus actividades se canalizaron a través de una serie de fundaciones, que en 2016 se consolidaron bajo el paraguas del Tony Blair Institute for Global Change (TBI) . Este instituto, presentado como una organización sin fines de lucro y no partidista, tiene la ambiciosa visión de construir «países abiertos, inclusivos y prósperos para todos». Su misión declarada es asesorar a gobiernos y líderes en estrategia, política y ejecución, aprovechando el poder de la tecnología.
Sin embargo, la realidad operativa del TBI ha generado un considerable escrutinio. Con un presupuesto anual que ronda los 30 millones de libras esterlinas, el instituto se financia a través de una diversidad de donantes, que incluyen emiratos árabes como Mubadala, Arabia Saudí, Kazajistán, Azerbaiyán, Ruanda, Open Society, Boeing y Google. Más recientemente, se ha revelado que el magnate Larry Ellison ha comprometido cientos de millones de dólares al TBI, lo que subraya la magnitud de su respaldo financiero .
El modelo de negocio del TBI se basa en la asesoría gubernamental a regímenes autoritarios, lo que ha sido una fuente constante de controversia. Países como Ruanda, Egipto y Arabia Saudí han contratado los servicios del instituto a cambio de contratos millonarios. En Egipto, por ejemplo, el TBI ha estado involucrado en la reforma de la burocracia y en campañas externas de «imagen» tras el golpe de Estado de Sisi . Esta práctica ha llevado a críticos a describir a Blair como un «lobista en la sombra» que convierte los conflictos geopolíticos en oportunidades de negocio .
Además, el fenómeno de la «puerta giratoria» es una característica notable de la operación del TBI. Ex-jefes de gabinete de Blair han transitado entre consultoras de renombre como BCG y McKinsey, o han ocupado puestos de influencia como la presidencia de la COP-28 (Emiratos), para luego regresar al TBI . Esta interconexión entre el instituto, el sector privado y las esferas de poder plantea interrogantes sobre la transparencia y la verdadera naturaleza de su influencia global.
Conflicto de Intereses Permanente: El Rol de Enviado del Cuarteto y sus Negocios Privados
El período en que Tony Blair ejerció como enviado del Cuarteto para Oriente Medio (2007-2015) es quizás el más emblemático de sus conflictos de intereses. Durante estos años, Blair mantuvo una serie de acuerdos comerciales privados que generaron serias dudas sobre su imparcialidad y su compromiso con la misión de paz. La prensa y diversos analistas han documentado cómo Blair cobró simultáneamente de múltiples fuentes mientras ostentaba un cargo diplomático crucial .
Entre los acuerdos más destacados se encuentran: • Mubadala (Abu Dhabi): Blair recibió 1 millón de libras esterlinas al año de este fondo soberano de Abu Dhabi . Esta relación se hizo más evidente cuando se reveló que Blair estaba considerando abrir una oficina en Abu Dhabi, y que mantenía una estrecha relación con el príncipe heredero Mohammed bin Zayed Al Nahyan . Críticos como Christopher Davidson de la Universidad de Durham señalaron que Blair era un «empleado pagado de Abu Dhabi» y que no representaba los intereses del Reino Unido .
- JP Morgan: El ex Primer Ministro cobró 2 millones de libras esterlinas al año de JP Morgan, siendo el fondo soberano de Libia uno de los clientes de la firma hasta 2011 .
- Petrofac: Se filtró en 2014 que Blair había ofrecido asesoría oculta a Petrofac, una empresa con contratos en Irak .
Estos acuerdos comerciales, a menudo opacos, llevaron a acusaciones de que Blair estaba utilizando su posición diplomática para beneficiar sus intereses financieros personales. El Gobierno británico fue criticado por no exigir su recusación, a pesar de que su propio Código de Conducta estipula la necesidad de «evitar toda apariencia de conflicto» . La incompatibilidad de sus roles fue destacada por Chris Doyle del Council for Arab-British Understanding, quien afirmó que Blair debía elegir entre su papel como enviado de paz y sus crecientes intereses comerciales y mediáticos en la región .
Las filtraciones de correos electrónicos, como las de 2017 que revelaron que el trabajo de Blair como enviado en Oriente Medio fue financiado secretamente por un «rico estado árabe» (identificado como los EAU), solo sirvieron para reforzar la percepción de un conflicto de intereses sistémico. Estos documentos sugirieron que los EAU gastaron millones de libras para financiar la oficina de Blair en Londres y emplearlo como consultor, aunque una portavoz de Blair negó las acusaciones .
Fracaso o Éxito como Mediador: La Percepción en el Conflicto Israelí-Palestino
El desempeño de Tony Blair como enviado del Cuarteto en el conflicto israelí-palestino es, en retrospectiva, objeto de un debate polarizado. Mientras algunos podrían argumentar que su presencia mantenía un canal de comunicación, la percepción generalizada, especialmente entre los palestinos, fue de un fracaso rotundo. En Ramala, llegó a ser considerado persona non grata, acusado de mantener reuniones secretas con Israel sin compartir las actas, de prometer fondos árabes que nunca se materializaron y de vetar la presentación de casos legales contra los asentamientos israelíes ante la Corte Penal Internacional (CPI) .
Por otro lado, Israel, según el análisis, utilizó la figura de Blair como una «prueba de imparcialidad» occidental, mientras que, paradójicamente, el número de asentamientos se incrementó en un 60% entre 2007 y 2015, el período de su mediación . Una conclusión académica citada en el documento base sugiere que «Blair no logró arrancar una sola concesión seria a EEUU; su estrategia de ‘atarse las manos’ con Bush fracasó y terminó legitimando la invasión de Irak sin obtener cambios reales en la MEPP» . Esta evaluación subraya la ineficacia de su mediación en la consecución de avances sustanciales hacia la paz.
Perspectivas No Occidentales y Filtraciones Parciales: Una Visión Crítica
La narrativa occidental sobre Tony Blair y sus actividades a menudo contrasta con las perspectivas de fuentes no occidentales y las revelaciones de filtraciones parciales, que ofrecen una visión más crítica y, en ocasiones, incriminatoria de su rol global.
A. Análisis desde la Academia y Think-Tanks Ruso-Chinos
Desde instituciones como el Instituto de Estudios Orientales de la Academia de Ciencias de Rusia (RAS, Moscú), Blair es descrito como un «contractor de estabilización neoliberal». Esta visión sugiere que sus intervenciones y asesorías se centran en la venta de «paquetes de estado de derecho» que, en la práctica, incluyen «represión preventiva, reforma fiscal regresiva y apertura a la inversión extranjera, todo envuelto en un discurso anticorrupción».
Esta interpretación lo posiciona no como un promotor de la democracia, sino como un facilitador de políticas que benefician a intereses económicos específicos, a menudo a expensas de la soberanía y el bienestar local.
De manera similar, un informe del CIIS (China) de 2023-02 califica al TBI como un «force multiplier de la influencia anglosajona en el sur global». Según este análisis, el instituto introduce «benchmarks occidentales que luego bloquean alternativas chinas (Huawei, Belt-Road) por ‘gobernanza’» . Esta perspectiva sugiere que el TBI no solo promueve un modelo de gobernanza, sino que también actúa como un instrumento geopolítico para contrarrestar la creciente influencia de potencias no occidentales.
B. Filtraciones: UAE-LEAKS 2019 y el Complemento Chilcot
Las filtraciones, particularmente los correos electrónicos «hackeados» de UAE-LEAKS en 2019 y la información complementaria del Informe Chilcot, han arrojado luz sobre las operaciones más controvertidas de Blair. Aunque no se han encontrado los documentos originales de estas filtraciones en la investigación actual, los resúmenes y citas en fuentes secundarias son reveladores .
Un correo electrónico del 18 de julio de 2010, atribuido al embajador británico en Abu Dhabi, indica que Blair deseaba presentarse como un «Mr. Fix-it» para Gaza. En este contexto, supuestamente solicitó 6 millones de dólares anuales a Mohammed bin Zayed (MBZ) y ofreció «control narrativo» en medios como BBC-Arabic y Al-Araby Esta revelación sugiere un intento de manipular la percepción pública y mediática en la región a cambio de financiación, lo que refuerza la imagen de un «lobista en la sombra».
La Minuta Reino Unido-Emiratos de 2014, publicada parcialmente por Middle-East-Eye, detalla una estrategia para Oriente Medio con objetivos muy específicos: «evitar el gobierno de unidad palestina; prioridad contener a Hamás; fórmula: gobierno de técnicos + fuerza árabe simbólica + inversión privada». Lo más llamativo es que esta fórmula «coincide punto por punto con la ‘propuesta Trump-2025’ que encabeza ahora Blair» . Esto vincula directamente las actividades pasadas de Blair con las iniciativas actuales, sugiriendo una continuidad en su enfoque y una posible influencia en la formulación de políticas de alto nivel.
Estas filtraciones, aunque parciales, pintan un cuadro de un Tony Blair profundamente involucrado en la configuración de la política regional, no solo como mediador oficial, sino también como un actor con intereses y agendas propias, a menudo alineadas con potencias regionales y globales específicas.
C. Pistas de «Mafiosidad Light»: Operaciones Opacas y Beneficios Cuestionables
Aunque no existen pruebas judiciales que vinculen a Tony Blair con actividades «mafiosas» en el sentido estricto (tráfico de armas, blanqueo, narcóticos), las filtraciones y las investigaciones periodísticas han revelado patrones de comportamiento que sugieren una «mafiosidad light», donde las líneas entre la asesoría legítima y el beneficio personal se difuminan .
- Contratos Petroleros en Kurdistán Iraquí (2011-2015):Durante este período, el TBI asesoró al gobierno regional de Barzani. Meses después, BP, una compañía que también era cliente de Blair, obtuvo campos petroleros en Shaikan y Tawke sin una licitación abierta . Esta secuencia de eventos levanta serias preguntas sobre la posible influencia de Blair en la adjudicación de contratos lucrativos a sus clientes.
- Acuerdo de «Rehabilitación de Imagen» del presidente egipcio Abdelfattah el Sisi-2016:Este acuerdo, valorado en 8 millones de euros del TBI más 12 millones de euros de BCG, tenía como objetivo mejorar la imagen del régimen de Sisi. Una parte significativa de estos fondos procedía del Fondo Saudí-Sisi y fue canalizada a través de empresas offshore en Isla Mauricio (Open-Owndata) . La complejidad de la estructura financiera y la implicación de entidades offshore añaden una capa de opacidad a estas operaciones, sugiriendo un intento de ocultar el origen y el destino final de los fondos.
Estos ejemplos ilustran cómo Blair y sus organizaciones han operado en un espacio gris, donde la falta de transparencia y la interconexión de intereses comerciales y políticos generan sospechas sobre la ética y la legalidad de sus acciones. Aunque no se ha probado ninguna actividad delictiva, el patrón de «lobista de sombra» que convierte los conflictos en oportunidades de negocio es innegable.
El Papel Actual de Tony Blair en Gaza: ¿Pacificador o Beneficiario?
El nombre de Tony Blair ha resurgido con fuerza en el contexto de la crisis de Gaza, donde se le ha propuesto como líder de una autoridad de transición. Esta propuesta, respaldada por Estados Unidos y Donald Trump, ha generado un intenso debate sobre sus motivaciones y los posibles beneficios para él y su institut.
Elemento
Función que Desempeña
Beneficio para Él / TBI
“Administrador civil” post-guerra
Da legitimidad “internacional” a un plan diseñado por EEUU-Israel-Emiratos.
Contrato millonario de reconstrucción (Boston Consulting ya está en la mesa).
Fuerza multinacional árabe-islámica
Prevé entrenar a los contingentes (Egipto, Marruecos) → TBI ya tiene programas de “capacitación gubernamental” en El Cairo y Ammán.
Ingresos por consultoría + control sobre quién accede a la franja.
Narrativa anticorrupción y “tecnócrata”
Presenta un gobierno “depoliticizado” → desactiva la resistencia palestina interna.
Se vende a EEUU/UE como “experto neutral” aunque sus clientes sean justamente los que cercan a Gaza (Egipto, Arabia, Emiratos).
El TBI ha estado vinculado a planes controvertidos para la reconstrucción de Gaza, incluyendo propuestas que han sido condenadas como «limpieza étnica». La participación de Blair en estas discusiones, dada su historia de conflictos de intereses y su estrecha relación con actores regionales clave, plantea serias dudas sobre su capacidad para actuar como un mediador imparcial. Su papel parece estar más alineado con los intereses de sus clientes y patrocinadores que con las necesidades y aspiraciones del pueblo palestino.
Conclusión: El Legado Ambiguo de un Consultor de Élite
El análisis de la trayectoria de Tony Blair después de su mandato como Primer Ministro revela un patrón claro y consistente. Lejos de ser un simple diplomático o un filántropo, Blair se ha consolidado como un consultor de élite que monetiza la geopolítica. Su modus operandi se basa en vender paquetes de estabilización a regímenes autocráticos, obtener contratos públicos y privados gracias a su acceso privilegiado a las élites anglosajonas y del Golfo, y utilizar su historial como enviado del Cuarteto para posicionarse como un puente indispensable entre Occidente y los países árabes moderados.
No existen pruebas contundentes de actividades «mafiosas» en el sentido judicial clásico. Sin embargo, la opacidad de sus operaciones, los conflictos de intereses permanentes y la forma en que sus «soluciones» a menudo benefician a sus clientes y a su propio instituto, pintan un cuadro de un actor que ha difuminado las líneas entre el servicio público y el beneficio privado. Su «arma» no es la violencia, sino el «benchmark occidental»: reformas que abren mercados, desarman resistencias políticas y, casualmente, dejan a su think-tank en una posición privilegiada para capitalizar los fondos de reconstrucción.
En última instancia, el legado de Tony Blair en la era post-gobierno es profundamente ambiguo. Para algunos, es un visionario que busca soluciones pragmáticas a problemas complejos. Para otros, es un «lobista en la sombra» que ha perfeccionado el arte de la influencia y el beneficio personal en un mundo cada vez más interconectado y conflictivo. La verdad, como suele ocurrir en estos casos, probablemente se encuentre en un punto intermedio, en la compleja interacción entre la ambición personal, la ideología y las realidades del poder global.
Las referencias: [1] Mis propias investigaciones de noticias aljazeera y otros canales de noticias
[2] Tony Blair Institute for Global Change. (n.d.).About Us. Recuperado de https://institute.global/who-we-are/about [3] Democracy for Sale. (2025, September 24). Inside the Tony Blair Institute – Democracy for Sale. https://democracyforsale.substack.com/p/inside-the-tony-blair-institute-larry-ellison-peter-kyle-starmer [4] The Guardian. (2014, June 27). Tony Blair accused of conflict of interests in Middle East. https://www.theguardian.com/politics/2014/jun/27/tony-blair-conflict-interests-middle-east [5] The Independent. (2017, August 15). Why was Tony Blair being paid by the UAE while working as Middle East envoy?. https://www.the-independent.com/voices/tony-blair-uae-middle-east-envoy-qatar-israel-palestine-foreign-office-a7894641.html [6] Science.co.il. (2017, August 13). Tony Blair’s Middle East envoy work secretly bankrolled by UAE. https://www.science.co.il/Arab-Israeli-conflict/articles/Malnick-2017-08-13.php [7] The Telegraph. (2017, August 13). Exclusive: Tony Blair’s Middle East envoy work secretly bankrolled by wealthy Arab state. https://www.telegraph.co.uk/news/2017/08/13/exclusive-tony-blairs-middle-east-envoy-work-secretly-bankrolled/ [8] BBC News. (2025, September 26). Tony Blair in discussions to run transitional Gaza authority. https://www.bbc.com/news/articles/c3drmk95xlzo [9] The Times of Israel. (2025, September 18). Revealed: Tony Blair’s US-backed proposal for ending the Gaza war and replacing Hamas. https://www.timesofisrael.com/revealed-tony-blairs-us-backed-proposal-for-ending-the-gaza-war-and-replacing-hamas/ [10] The Guardian. (2025, September 25). Washington backing plan for Tony Blair to head transitional Gaza authority. https://www.theguardian.com/world/2025/sep/25/washington-backing-plan-for-tony-blair-to-head-transitional-gaza-authority [11] Middle East Eye. (2025, July 6). Tony Blair Institute linked to Gaza plan condemned as ‘ethnic cleansing’. https://www.middleeasteye.net/news/tony-blair-institute-linked-gaza-plan-condemned-ethnic-cleansing