- Escrito por Juan Celdrán Navarro.
Había un argumento irrefutable que empleaban algunas personas, padres y madres sobre todo cuando no poseían una explicación clara y concisa sobre una idea, mi madre así lo hacía, “es por tu bien”. Al ser por tu bien había que aceptar cualquier imposición por mucho que nos costase como por ejemplo la Mili, el servicio militar obligatorio de hasta 18 meses que hasta los años 90 tuvimos que padecer los jóvenes aunque fuera una pérdida de tiempo absurda, tan absurda que muchos partidos políticos de algunos países están dispuestos a recuperarla, una referencia que indica qué tiempos estamos viviendo.
Con las muchas imposiciones de la iglesia católica creo incluso que sigue siendo así, a la hora de bautizar a los críos, de hacer la comunión, la confirmación inclusive, las bodas y hasta el entierro, porque quien no haya dejado claro que no quiere un entierro religioso, habrá un cura en el suyo dispuesto a monopolizar la ceremonia como tus allegados no espabilen, todo es por tu bien, así que déjate llevar y acepta la imposición.
Digo todo esto porque tenemos algunos altos cargos dentro de las autoridades religiosas, arzobispos, obispos y lo que forma la Conferencia Episcopal que son un peligro social y que al recibir dinero de todas las personas que conformamos el Estado español deberían de controlar sus declaraciones muchas de ellas intolerables y si lo hacen deberían ser investigados por las fiscalías correspondientes, ya sabemos que están blindados por el Acuerdo con el Vaticano de 1979, ése acuerdo es lo primero que habría que derogar, por democracia, por laicidad y para que las autoridades eclesiásticas no estén blindadas.
Me quiero referir al arzobispo de Oviedo Jesús Sanz por ejemplo, que después de muchas declaraciones inaceptables durante mucho tiempo, lo último es calificar de rifirrafe entre Israel y Hamas el genocidio, en los hechos de Jumilla preguntaba: ¿dónde está la reciprocidad negada de los moritos con los cristianos que asesinan en nuestras iglesias dentro de sus territorios?.
Lleva en el cargo desde 2009 y son tantas las declaraciones cargadas de odio y de confrontación que me pregunto ¿cómo es posible que un impresentable como éste tipo pueda tener un cargo importante en una institución que maneja tanto dinero público y tanto poder, lo hace fuera de sus obligaciones pero también dentro de los actos religiosos y civiles acompañado de la mayoría de cargos públicos, como en el Día de la Comunidad Autónoma donde ha llegado a pedir adelanto electoral.
Hay muchos más como él, como el obispo de Alicante José Ignacio Munilla con un curriculum cargado de un sesgo de extrema derecha, todos son hombres porque las mujeres en dicha institución sólo están destinadas a labores de educación, sanidad y de limpieza, todos son hombres que están cobrando toda su vida del Estado y no tienen responsabilidad en sus acciones o declaraciones, gozan de una inmunidad como la de Juan Carlos, son inviolables. Y no vale que lo hacen por nuestro bien, porque sólo ven el suyo y no son capaces de entender que somos cada vez más los que no pensamos como ellos.
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