Murcia se moviliza contra el cierre del Centro de Menores de Santa Cruz: una llamada a la defensa de los derechos de la infancia más vulnerable

Colectivos sociales, sindicatos y partidos políticos denuncian el abandono institucional de los menores tutelados en la Región

Centenares de personas se congregaron este martes, 29 de abril, en Murcia en una concentración convocada por el movimiento Yay@flautas y respaldada por múltiples colectivos sociales, sindicatos y partidos políticos, para expresar su rechazo al cierre del Centro de Menores No Acompañados de Santa Cruz, una medida que consideran «injusta e irresponsable».

Durante el acto, se dio lectura a un manifiesto que denuncia que esta decisión «atenta directamente contra los derechos humanos y la dignidad de los menores más vulnerables de nuestra sociedad». Los asistentes recordaron que los niños y adolescentes que llegan solos a España «no son una amenaza, son personas que huyen de la violencia, del hambre y del abandono, en busca de un futuro digno».

Según los datos publicados por la CARM, más de 1.200 menores están bajo protección institucional debido a situaciones de maltrato, abuso o abandono. De ellos, 674 se encuentran en acogimiento familiar, mientras que 570 permanecen en centros residenciales a la espera de una familia . Además, la comunidad acoge actualmente a 235 menores migrantes no acompañados, lo que no representa siquiera un 19% del total de menores en situación de protección en la Región de Murcia.

Representantes de asociaciones vecinales, plataformas de derechos humanos, sindicatos como CCOO y UGT, así como portavoces de partidos políticos como Izquierda Unida, Podemos, PSOE y Movimiento Sumar, tomaron la palabra en el micrófono abierto para denunciar la situación y exigir políticas públicas de acogida «dignas, humanas y justas».

El cierre del centro de Santa Cruz, que actualmente alberga a 60 menores españoles y extranjeros, se produce en un contexto de saturación de la red regional de acogida, que opera al 220% de su capacidad. La medida ha sido interpretada como una concesión del Partido Popular a las exigencias de odio de la ultraderecha, que ha presionado para clausurar el centro en pactos gubernamentales y presupuestarios.

Por último, desde el movimiento Yay@flautas y las organizaciones convocantes, se hizo un llamamiento a toda la ciudadanía de la Región de Murcia a implicarse en la defensa de los derechos de los menores no acompañados y a rechazar cualquier intento de criminalización o abandono institucional.